La sardina del río Segura. |
El monumento al Entierro de
la Sardina (28 de abril de 2007) obra del escultor Miguel Llamas
se sitúa en el centro del cauce del río
Segura a su paso por Murcia, junto a dos
construcciones emblemáticas: El Puente Viejo
y Los Molinos del río.
Este ambicioso proyecto no se acabo hasta después de 5 largos años, teniendo que superar serios obstáculos: encontrar quien se hiciera cargo íntegramente de la financiación de la obra (> de 500.000 euros), obtención de los permisos necesarios de la Administración para colocar la escultura en el lecho del río, y superar los problemas técnicos propios a la cimentación de una escultura de considerables proporciones y peso (23 metros de longitud y 12 toneladas) en este medio tan problemático.
Este ambicioso proyecto no se acabo hasta después de 5 largos años, teniendo que superar serios obstáculos: encontrar quien se hiciera cargo íntegramente de la financiación de la obra (> de 500.000 euros), obtención de los permisos necesarios de la Administración para colocar la escultura en el lecho del río, y superar los problemas técnicos propios a la cimentación de una escultura de considerables proporciones y peso (23 metros de longitud y 12 toneladas) en este medio tan problemático.
Por la boca de la sardina emana un chorro de agua
de casi igual longitud que el monumento, describiendo una bonita parábola,
por otra parte, imagen gemela del arqueo que se le intuye a la sardina.
Pues yo la veo triste, ¿No será que no acaba de acostumbrarse al agua dulce y por eso la expulsa continuamente? ¿O será una burla disimulada a los viandantes que la contemplan desde los márgenes del río?
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